viernes, 24 de septiembre de 2010

Cuentas claras: transporte público


Esta semana volvió a surgir el conflicto por el aumento del boleto del transporte público. Hubo fuertes cruces entre funcionarios, custodia policial en la entrada de la municipalidad por las marchas de los sectores que se oponen a la suba pero nada que deje en claro cuál es la situación del transporte en nuestra ciudad.

¿De cuánto sería el aumento en realidad?

Es importante recordar que este sería el segundo aumento en lo que va del 2010. En enero de este año el boleto pasó de $1,30 a $1,60 y ahora la comisión mixta plantea dos posibles valores de $2,21 y $2,41, con lo cual la suba anual sería de nada más y nada menos que de un 70% o un 85%, según cuál de los dos nuevos valores propuestos se tome. Es necesario hacer esta aclaración ya que en varios medios se ha reflejado que el aumento sería del orden de 38 al 50%, esto ocurre porque toman como base el boleto a $1,60 cuando en realidad hay que tomar el boleto a $1,30 y medir la variación en el año, sino se pierde el sentido del cálculo.

Números poco claros de un negocio millonario

Por ahora las empresas de transporte juegan al silencio. No así desde el municipio, donde la nota de color la dio el subsecretario de Transporte de la Ciudad de Corrientes, Gustavo Larrea, quién por una parte dijo que “hay un desfasaje de por lo menos el 15%” en el valor del boleto pero luego avala una tarifa de $2,21 significando esto un aumento del 38%.

Por otra parte, Larrea expresó que se supone que “las empresas reciben subsidios por $6.600.000 pesos al año, cuando sólo hay que verificar la página de la Secretaría de Transporte de la Nación y esos montos no llegan ni a la mitad”. Sin embargo, verificando en el sitio oficial de dicha Secretaría (http://www.transporte.gov.ar) las empresas reciben sólo de subsidio en concepto de SISTAU (Sistema de Transporte Automotor) alrededor de $800 mil por mes. A este monto se agregan otros conceptos como C.C.P (Compensación Complementaria Provincial), subsidio salarial por trabajador y subsidio en el precio del combustible, llegando para el último mes de agosto a la suma de $5.120.605*, es decir que lo que el Larrea dice que reciben en un año es lo que prácticamente reciben en un sólo mes. Este número además no incluye los subsidios que les da el municipio en patentes, multas y otros. Difícil será que se negocie un buen precio para los vecinos de la capital si no se tiene claro esto.


El ABC de subir el boleto

La técnica no es exclusiva de este gobierno municipal, en todas las administraciones ha sido la misma: “las empresas piden más para acordar por menos”. Así es de suponer que el boleto no llegue a ninguno de los valores propuestos por la comisión mixta sino que llegue a un valor de $2.

Transporte, ¿público?

Si el boleto llega a los $2, el costo de trasladarse en colectivo para una pareja capitalina tipo será de $384 mensuales, con lo cuál le convendrá más comprarse una moto y asumir sus costos que usar el transporte público. Seguir en este rumbo no es sostenible, si no se cambiamos la política de transporte estaremos diciendo que es más público el transporte privado que el que se hace llamar de este modo.

* Datos oficiales de la Secretaría de Transporte de la Nación (http://www.transporte.gov.ar) y de A.U.C.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Aumento salarial: un ejemplo a seguir


Hace unas semanas mientras los gremios docentes “duros” locales nucleados en SUTECO, SADOP y ACDP discutían nuevamente el aumento del salario docente, en el país vecino de Uruguay, su presidente José “Pepe” Mujica hacía un planteo al menos innovador sobre la renegociación salarial que llevará a cabo su administración.

Mujica proponía nada más y nada menos que fijar los sueldos de los empleados estatales según el desempeño y lo hizo saber a través de uno de sus ministros quien declaró que era prioridad “avanzar en la remuneración por resultados a nivel global en la administración”. La base de la propuesta impulsada en Uruguay, busca poner en debate como se implementarán los nuevos incrementos salariales.

En general cuando un sector reclama un aumento, el fondo de la cuestión es la lucha por el derecho un salario digno o competitivo para la función que cumplen en sus puestos de trabajo, pero lo que quiere sumar Mujica a ese derecho es el concepto de cumplimento obligaciones como parte de la mejora salarial para los trabajadores.

El presidente uruguayo fue más lejos y para introducir la propuesta en el debate optó por comenzar con el sector docente. De esta manera buscará vincular parte del esfuerzo que realiza la sociedad para financiar a la educación pública con un correlato en los indicadores de mejora de la calidad educativa. Así la propuesta inicial en concreto fue que del 22% de aumento que se otorgará a los docentes un 8% estaría atado a metas de gestión y presentismo.

El debate con los docentes no será sencillo y deberán discutirse también asuntos como la inversión en infraestructura, materiales para clases y otros elementos que también influyen en el desempeño docente y hacen a la calidad educativa. Lo que no debemos dejar de reconocer, es que Mujica traza un dirección en la cual deberíamos a avanzar y de una vez por todas empezar a hablar no sólo de derechos sino también de obligaciones.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Ayuí: contaminación y política


Más allá del debate en particular sobre el proyecto Ayuí Grande, nuestra provincia se juega el futuro de su desarrollo en los próximos años. ¿Cómo deberíamos enfrentar esta situación?

La preocupación por proteger el medio ambiente no es sólo legítima, sino necesaria. Gracias al esfuerzo de los grupos especializados en impacto ambiental por difundir la problemática el cuidado del mundo en que vivimos se ha instalado en la agenda de la sociedad. Sin embargo, esta suerte de “concientización” ha llevado a algunos sectores a una posición extrema, como define el filósofo español Fernando Savater, no son lo mismo lo ecologistas que los ecólatras.

Mientras los ecologistas son quienes se preocupan por la conservación de la naturaleza entendiendo las necesidades del hombre que la habita, los ecólatras sólo se interesan en conservar el medio ambiente por el hecho mismo de preservarlo, sin importar las necesidades del hombre. Así para el ecólatra cualquier tipo de contaminación del medio ambiente es despreciable, pero se olvida que toda actividad humana es contaminante y que sin ella el desarrollo y el progreso de la vida humana son imposibles. Siguiendo esta lógica no se podrían producir energía, alimentos u otros bienes para la gran cantidad de habitantes que viven hoy en nuestro planeta.

Es por ello que el debate sobre Ayuí Grande no debe darse en el maco irracional de decir que el proyecto “contamina”, ya que esto no es suficiente y lo que se debe juzgar es si se está haciendo de la manera que puede generar menor impacto dada su producción. Esto es vital debido a que sin ello nuestra provincia, tan rica en recursos naturales, no podrá dar el próximo paso hacia el desarrollo. Hoy es Ayuí, pero mañana tendremos que dar el debate sobre la represa Garabí, la industria forestal para darle valor agregado a la madera con una papelera u otros proyectos que saquen a nuestra provincia de la pobreza y el subdesarrollo en que estamos sumergidos.

Serán los técnicos y científicos lo que tendrán que dar el debate específico sobre cada proyecto, pero somos nosotros los que debemos apostar al desarrollo sustentable que nos permita un equilibrio entre naturaleza y desarrollo económico. Lo que tampoco debemos dejar que suceda, es que la cola de la mala política se meta y en vez de discutir lo importante sobre Ayuí Grande, algunos se opongan solamente porque uno de los integrantes del grupo económico que lleva adelante el proyecto, es también parte de su “archi” enemigo en el Grupo Clarín.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Desendeudamiento: La verdad


Finalmente en el último minuto, como en una película de acción y no como debería haber sido en un marco político responsable, Corrientes accedió al Plan de Desendeudamiento. ¿Quién paga la cuenta? ¿Nos hace un gran favor la nación?

Lo más destacable del “Plan de Desendeudamiento” es el alivio financiero que traerá para la provincia debido a la refinanciación del los 1.700 millones de pesos que tenían vencimientos entre el 2013-2017 y ahora van a pasar al 2030. A esto debemos sumarle la baja en la tasa de interés que será del 6% fija y además la actual administración tendrá un período de gracia hasta enero de 2012 para empezar a pagar. Sin embargo lo más interesante es de donde saldrá el dinero para que el stock (o monto total) de deuda de la provincia se reduzca en aproximadamente un 40% como hemos escuchado en varias declaraciones a los medios.

Se ha hablado en muchas oportunidades de “un gran gesto de Nación o de la presidente con las provincias”, pero lamento informarles que en realidad no es tan así. El “esfuerzo” que hace Nación por las provincias está en la refinanciación, es decir en alargar los plazos para pagar y en bajar los intereses. A cambio se asegura no perder recursos valiosos como podría haber sido la coparticipación del impuesto al cheque entre otros si las provincias avanzaban en el Senado Nacional.

Sin embargo lo que no se dice es que gran parte del desendeudamiento se hace con plata de las provincias y que el gobierno nacional les debía, es decir que el gobierno no nos está “perdonando nada” sino que esta compensando una deuda con otra. Para hacerlo sencillo, las provincias le debían dinero al gobierno nacional pero éste a su vez les debía dinero a las provincias de los famosos recursos no distribuidos del Fondo ATN (Adelantos del Tesoro Nacional) que se vienen acumulando desde el año 2002 y llegan a la suma de $9.400 millones.

En fin, lo que hizo el gobierno nacional fue en gran medida “devolver” esos fondos a las provincias. Lo único que nos “perdonó” fue una baja de interés, pero de ninguna manera nos desendeudó con recursos propios sino nuestros. Así, si bien la intención del gobierno central es buena, se adjudica más méritos de lo que le corresponden.